Friday, November 13, 2009

La Nota del Día: Sólo Dios puede anticipar dónde caerán las desgracias


Bla, bla, bla, bla, bla. Gastando saliva el escuadronero. Que se debió hacer esto y lo otro, como siempre el perro Altamirano lo sabe todo. Pero donde se hace el de los panes es en no establecer que el partido escuadronero se quedó de brazos cruzados despues de sendas catástrofes naturales en años anteriores.
Habla de que hay que tener cuidado con la corrupción en la distribución de las ayudas hoy, pero no acusa a sus compinches de ARENA de haberse robado a manos llenas las donaciones y los préstamos millonarios durante los desastres del Mitch, Stan, terremotos del 2001, etc.
Hoy le preocupan las familias que viven en champerios a la orilla de los rios, ¿Dónde estaba el llanto de este embrutecido por el odio, éstos últimos 20 años?
Hoy dice que las ideas del demagógo Quijano con respecto a las bovedas son muy buenas, y entonces ¿Porque no ha movido un dedo el alcalde, si dijo en la campaña que el dinero ya estaba asegurado con la participación de empresarios?. El pueblo no olvida que con esa mentira y un montón de votos de extranjeros se hizo de la alcaldía de San Salvador. Cuando vió que no era solo de soplar y hacer botellas, se puso a llorar que sin el aporte del ejecutivo no se pueden hacer las bovedas.
Por otro lado, ¿Que no fue este hijo del diablo Altamirano el que hace solo unos meses publicó en su pasquín que en El Salvador los ranchos (champas) eran cosas del pasado?

2 comments:

Anonymous said...

Ese HDCPutas corrupto es un desalmado, nunca le ha importado la gente pobre siempre les dice chusma, y carga para el pais. Ahora quiere que Funes construya las bovedas para que el lloron quijasno salga en caballito blanco y ganar puntos con los votantes. Ojala el pueblo este viendo bien clarito quien es el que esta con el, es el FMLN.

Anonymous said...

Deberian dejar a la Norma Quijano hacer las bovedas, asi cuando estallen por la presion del agua y se muera la gente que vaya pasando lo demandamos por imbecil, necio y maricon.